Comprendí la rabia
los desprecios ajenos
la verdad subjetiva
de los círculos del cielo
las primaveras duelen en la soledad
deshojando margaritas
construyendo épicas historias
de desamor y vendimias de caricias
las lunas como reliquias
maquillan frases inciertas
cuando se niegan los besos
en los bares del pueblo
la flor que crece en mi jardín
hace alarde de belleza
adorna los instantes de satín
el nogal de las delicias
el rebozar de las alacenas
hacen del menú libertad
pagando al sol un clásico
con trompeta y violín
los azares del destino
de un domingo sin el circo
vomita las paredes
de banderas sin mástil
la alcoba de una bruja
desnuda el alma en tempestades
lo prohibido de las rosas
espinan adosadas de ricina
la conciencia es la mentira
que nos mimetiza
el frenesí de los borrachos
el agua turbia de los manantiales
cuando el sol se seca
la luna no sonríe igual
en invierno no entrena la osadía
ni en verano la religión
se maquilan los gestos
en fabricas de hule
los héroes del asfalto
rumia venganza el cutre
los círculos del cielo
uno a uno como tren
en un mar de gotas
la cobardía y el desdén